Todas las mujeres tienen un estilo característico que incluye una forma de vestir, un peinado y una rutina de maquillaje determinada. El estilo que se construye con estos elementos es parte de la imagen personal, que no es más que lo que proyectas a otras personas con la apariencia.
En general, la imagen personal se alinea con tu percepción de ti misma y con lo que quieres que otros piensen de ti al verte. De este modo, puedes lucir un estilo clásico, moderno, juvenil, etc.
Sin embargo, es normal querer hacer un cambio de look personal en algún momento de tu vida. Especialmente, cuando ya no estás conforme con lo que tu estilo proyecta. Esto puede ocurrir durante la transición a la adolescencia y a la adultez. También, al iniciar la vida laboral, al convertirte en madre e incluso después de vivir experiencias transformadoras a nivel emocional.
Cuando se presenta ese momento en el que te miras al espejo y no te sientes cómoda con lo ves, es normal sentir frustración. Sobre todo, por la certeza de que necesitas un cambio y no sabes por dónde empezar. Para aclarar tus ideas y renovar tu estilo, sigue nuestras recomendaciones.
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Pasos a seguir para conseguir el cambio de look personal que deseas
Busca opiniones
Antes de tomar una decisión radical como cortarte el cabello o deshacerte de toda tu ropa, consulta la opinión de familiares cercanos o amigos. Es importante que le hagas las siguientes preguntas:
- Si no me conocieras, ¿cómo crees que soy por como me visto?
- ¿Qué parte de mi estilo me recomiendas cambiar?
- ¿Crees que debería renovar mi cabello o usar otro tipo de ropa?
Sus respuestas servirán como punto de partida para saber cuáles aspectos de tu look funcionan, y cuáles necesitan una renovación.
Encuentra inspiración
Para hacer tu cambio de look personal más sencillo, inspírate con el estilo de una modelo a seguir. Puede ser una celebridad o una influencer de redes sociales que te guste por cómo viste y por lo que proyecta con su apariencia.
Otra opción es crear una colección de fotografías en Pinterest que compartan el mismo estilo. Observar todas las imágenes juntas te ayudará a pensar qué te gustaría ver en ti y qué cambios debes hacer para imitar ese look.
Consulta con un estilista
Si estás segura de que tu cabello necesita un refrescamiento, lo mejor es consultar con un estilista. Especialmente, si no sabes si deberías cortarlo o pintarlo ni cómo.
El estilista te dará una opinión profesional basándose en el estilo que quieres llevar, la textura de tu cabello, su color y su longitud. Por lo tanto, es la persona que mejor te guiará en este proceso.
No obstante, antes de tomar una decisión sobre tu cabello, piensa qué tanto tiempo estás dispuesta a dedicarle a diario. Algunos cortes, como los de capas y flequillos, necesitan un mantenimiento frecuente para que luzcan bien. Otros se ven mejor en cabellos lacios, por lo que si tu cabello es rizado, ¿planeas alisarlo con frecuencia?
Escoge un corte y peinado que se adapte a tu estilo de vida y puedas mantener siempre bien. De nada te servirá salir de la peluquería renovada y verte desarreglada a los pocos días.
Péinate según la forma de tu cara
No es obligatorio hacer grandes cambios en tu cabello para que se vea bonito y diferente. Con renovar la forma en que lo peinas a diario podrás darle un nuevo aire desde casa.
La clave es adaptar los peinados a la forma de tu cara. Existen caras ovaladas, alargadas, redondas, cuadradas, corazonadas y triangulares. Para saber de qué forma es la tuya, recoge tu cabello hacia atrás y observa la silueta de tu rostro en un espejo. Cuando la tengas, consulta estos consejos:
- Caras ovaladas: los rostros con esta forma se consideran perfectos porque cualquier peinado les va bien. Esto se debe a que los rasgos están equilibrados, de modo que pueden destacarse con algunas capas frontales o un flequillo
- Caras alargadas: el cabello largo hace que estos rostros se vean más estirados, por lo que llevar peinados recogidos con trenzas o coletas es la mejor opción. Las ondas también le dan una buena proporción a estas caras.
- Caras redondas: para estilizar este tipo de rostro, los cabellos medianos y largos son los indicados. Así mismo, se evitan peinados con volumen a la altura de las mejillas, ya que crean anchura.
- Caras en forma de corazón: los peinados con raya en el medio disimulan el ancho de las sienes, así como los peinados con ondas. Estos aportan equilibrio y restan protagonismo a la barbilla prominente.
- Caras cuadradas: para disimular la frente amplia, se usan flequillos. Además, los peinados con ondas al nivel de la mandíbula ayudan a suavizar los rasgos.
- Caras triangulares: el cabello suelto es muy favorecedor para estos rostros, así como los flequillos y las capas a la altura de los pómulos.
Renueva tu maquillaje
Muy probablemente, estás acostumbrada a utilizar el mismo tono de labial y sombras de ojos todos los días. Para acabar con esa monotonía, atrévete a probar estilos de maquillaje diferentes hasta encontrar uno con el que te sientas cómoda y a gusto.
Puedes acentuar los ojos con un delineado de gato o darle color a tus labios con un labial rosa o rojo. Otra alternativa es probar la tendencia nude para la que necesitarás tonos naturales. Todo es cuestión de probar y verte al espejo para descubrir qué estilo expresa tu nueva esencia.
A fin de cuentas, hacer un cambio de look personal es una oportunidad para reinventarte. Por ello, disfruta el proceso y no te agobies. Dale paso a nuevas ideas y atrévete a cambiar tu ropa, tu cabello y todo lo que consideres necesario para proyectar la imagen que quieres que otros vean de ti.